ALGUNOS DATOS SOBRE LOS DELFINES

 

1. Los delfines tienen un cerebro mayor que el de los seres humanos. El cerebro de un delfín mular mide de media unos 1500-1700 cc, siendo el humano de unos 1300-1400 cc. Lo que resulta todavía más impresionante es que el cerebro de los delfines es más complejo que el humano, con más «pliegues» de sustancia gris, que los biólogos consideran la mejor prueba de inteligencia superior.

2. Ciertas teorías científicas proponen que los delfines necesitan cerebros muy grandes para utilizar su sofisticado sónar, que les permite «ver» con el sonido. Es un sentido tan potente que puede detectar diferencias sutiles en distintas monedas de metal desde grandes distancias o incluso a una mujer embarazada.

3. Los delfines pueden oír y comunicarse en un rango de frecuencias mucho más amplio que el de los seres humanos.
Su rango va de los 75 Hz hasta los 150 kHz o más, pero la mayoría de las personas sólo pueden oír frecuencias mucho más reducido, que van de los 20 Hz a los 20 kHz. (Se sabe que las pruebas de dispositivos sónicos de la armada provoca daños cerebrales en cetáceos situados a kilómetros de distancia de las zonas de pruebas).

4. Un delfín puede sumergirse hasta los 100 metros de profundidad en una sola respiración debido a la riqueza de hemoglobina en su sangre, que le permite almacenar una cantidad de oxígeno más de diez veces superior a la de la mayoría de los mamíferos. Mandy Rae Cruickshank, la campeona del mundo de apnea, consigue descender, con mucho entrenamiento, 88 metros.

5. Los delfines que viven en cautividad son capaces de aprender unas 90 órdenes en el lenguaje de signos americano.

6. Algunas muestras de carne de delfín contenían más de 1.000 veces los niveles máximos permitidos. Sin embargo, no se han documentado médicamente casos de intoxicación por mercurio debidos al consumo de esta carne.

7. Varias escenas de The Cove demuestran que se ha envasado y vendido carne de delfín como carne de ballena, lo cual constituye un engaño al consumidor respecto al origen y la toxicidad de la carne.

8. Un estudio internacional reciente reveló que la carne de delfín contiene, de media, cinco veces el nivel máximo permitido de mercurio.

9. Un delfín capturado vivo para los espectáculos de los parques marinos puede llegar a venderse por 150.000 dólares, mientras que un delfín muerto destinado al consumo cuesta unos 600 dólares.

10. Entre los delfines que se matan en las cacerías de Taiji se encuentran delfines mulares, delfines estriados, delfines moteados y delfines grises, además de orcas bastardas y calderones de aleta corta. Varias de estas especies se consideran especies amenazadas.

11. En 1986, el mundo declaró ilegal la captura de ballenas con fines comerciales. Sin embargo, la caza de delfines sigue siendo legal, porque, aunque los delfines y las ballenas pertenecen a la misma familia y comparten ciertos rasgos de inteligencia y autoconsciencia, a fecha de hoy los miembros de la Comisión Ballenera Internacional no han acordado proteger a los llamados pequeños cetáceos.