Las películas de saga son un arma de doble fijo: a) crean leyenda y b) tienes que conocerte todo el culebrón para comprender la nueva oferta. Fueron las primeras en crear las redes sociales, antes de Internet, pariendo una legión de enganchados frikis y marujones. Cuando hablamos de terror acompañado por la polémica, el cocido se calienta. Siguiendo este estilo, el principio de “SAW VI” es una continuidad del último final (que suele quedar abierto), donde la rentabilidad del producto cuenta en grandes proporciones.
La nueva entrega de “SAW” representa un juego de maldad y valoraciones morales que puede caer en el peligro de confundirse con la sangre fácil. |
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“SAW VI” es sinónimo de desorientación. El pánico busca la vida en la mutilación mientras huye de la muerte certera.
Los juegos de imágenes en flash-back reenganchan con una pasado letal de diseño maquiavélico. Esta prolongación sangrienta no implica continuismo, a pesar de que en su interior se encuentre latente la semilla de antiguas ediciones. Si piensas que vas a ver una exhibición de vÍiceras saltarinas y órganos huérfanos, estas equivocado... no es un desfile.... |
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| La cinta de Kevin Greutert usa el juego de la venganza como recurso a desarrollar en un guión inteligente. Resulta más interesante. Ello se debe a un equipo coordinado que, sin ser padre de la criatura, ha contribuido a que diera sus primeros pasitos: su director, Kevin Greutert conoce la mente de Jigsaw/John al haber realizado tareas de edición en “SAW”, “SAW II”, “SAW III”, “SAW IV” y ”SAW V”; Marcus Dunstan y Patrick Melton no han tenido problemas en escribir el guión gracias a su entendimiento dentro de “SAW IV - V ”. |
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Violencia y venganza: ¿términos malignos? Los personajes son marionetas de su voluntad. La pirámide social está formada por seres humanos que etiquetan y que son etiquetados: a partir de aquí, comienza un proceso de selección tan cruel como los juegos de Jigsaw. Cambian los blancos; por lo demás: todo sigue igual.
Si Jigsaw (Tobyn Bell) murió en la quinta entrega, permanece la secuela de su intención. El juego de la supervivencia, conviviendo con el pasado, se topa con episodios articulados por una mente retorcida, ingeniosa, sádica. En “SAW VI”, decidir implica sacrificar. El suspense lleva implícito una reflexión sobre la vida con juegos truculentos, arañando un final en el que no agradan las decisiones a tomar. Trata sobre el alcance de nuestras decisiones: a quién afectan y de qué manera. La vida se convierte en supervivencia a ojos del hombre asustado. |
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¿Existe una violencia constructiva?... La venganza es el móvil de la película.
La acción se sitúa en una ambiente despiadado y políticamente correcto. La sociedad le sirve a Jigsaw para organizar juegos y castigos. Greutert sitúa sus tentáculos en una sociedad discriminatoria, feroz, cuyos métodos selectivos mandan nuestras vidas. Depositamos la confianza en tiburones a jornada completa bien remunerados. Tu vida es un contrato con el tiempo que otros administran, Jigsaw modifica la letra pequeña que nunca leemos. |
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El argumento es original y tentativo. La pesadilla interna de una persona desbordada por un poder decisivo trastocado. El viaje de un hombrecillo por el mundo del sufrimiento físico y moral. El metraje es correcto, lleno de movimiento dentro de un ambiente angustioso. “SAW VI” luce un gore sofisticado que sirve para analizar el comportamiento humano.
La fotografía de David A. Armstrong encuadra mejor el papel claustrofóbico de los escenarios creando un entorno oxidado. Los planos rezuman un fétido olor a subterráneo.
“SAW VI” es un viaje por un laberinto donde el hombre se siente un ratón perdido, cuya supervivencia está a un paso entre la vida y la muerte. |
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Su estreno viene precedido por la polémica. En de octubre de 2009, hubo un intento fallido de estreno por parte de la distribuidora Buenavista. La Comisión Calificatoria del Ministerio de Cultura Español le otorgó la calificación X, que reciben, según la Ley, "las películas de carácter pornográfico o que realicen apología de la violencia".
Es la primera vez en España que esta categoría recae en un filme por el apartado “violencia”. |
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Películas que han creado dinastía, como “Rambo” o “Terminator”, son consideradas clásicos del vine bélico y futurista. Se convirtieron en taquillazo regalando violencia gratuita en salas comerciales. “SAW VI” propone unos juegos de supervivencia más elaborados. Es una película de culto que se desarrolla entre la lucha por vivir y la frialdad de “¡prueba superada!”.
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