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INTIMIDAD VIOLADA
Película "Paranorrmal Activity".
J. G.
(Madrid,
España)
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Ficha Técnica |
Paranormal Activity 2 |
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Quien no admita la evidencia de que los hechos paranormales existen, es un iluso. Quien se aprovecha del impacto que esta materia, tintada de terrorífica, causa entre la gente joven: un negociante listillo. Estas imágenes reales e intangibles no sobrepasan en la película de Oren Peli un valor de documental curioso, de poca ayuda científica para
entender mejor a la comunidad de los espíritus malignos. Todo el mundo puede ser friky pero, creo, que muy pocos pueden permitirse el lujo de ser timados. |
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El éxito de “Paranormal Activity” viene apoyado por el efecto viral de su expansión a través de Internet. Su comercialización en las salas de cine lo convierte en contenido poco creíble para un cinéfilo. En una cultura de la imagen objetiva es necesario reclamar nuestro deecho agnóstivco frente a lo probado a través de frames. El debate sobre la verdad o falsedad de lo paranormal está abierto.
Su virtud radica en la inexistencia de sangre gratuita, efectos artificiosos (es imagen real) y situaciones tragicómicas al estilo Halloween. Es una película actual. Ha sido rodada dentro de la cultura del DVR casero, con el botón de rec siempre encendido, sin guión. Utiliza la tecnología del /fast forward/ para convertirse en materia de consumo rápido. Las cintas originales se encuentran registradas como pruebas en el Departamento de Policía de San Diego. No se trata de un testimonio artístico ya que no despierta sentimiento alguno; su interés investigador se derrumba al no cumplir uno de los pilares que sustenta al método científico: la reproductibilidad. |
No todos estamos poseídos pero sí que sufrimos el acecho de fuerzas oscuras malignas. El agente especial Fox Mulder (David Duchovny) considera en “Expediente X” que "la verdad está ahí afuera". Con “Paranormal Activity" aprendemos que el mal se puede encontrar dentro de nosotros, dormido. Telerealidad con calidad digital. El escalofrío surge desde la reflexión, al pensar que yo puedo ser el siguiente.
Katie Featherston (“Mutation” 2006, Brad Sykes) y Micah Sloat construyen una filmación casera de paso instantáneo. Es borrascosa e intrascendente salvo para los frikis amantes de la ouija. |
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Desde el punto de vista de la técnica cinematográfica, la toma de cámara en mano propuesta por Oren Peli ni es nueva ni representa una revolución artística. El cine de Agnès Varda, impulsora de la Nouvelle Vague, utiliza esta manera de captar la imagen en “Les Glaneurs et la Glaneuse” (conocida por el cine español como "Los espigadores y la espigadora”), cuya narración y técnica se componen de planos inusuales. Sigue el mismo patrón en ”Les plages d’Agnès”, creando un cine autodocumental donde los planos fijos se convierten en retratos móviles con cámara en mano.
Este cine en movimiento alzado experimenta una vuelta de tuerca con “Bailando en la oscuridad”, dirigida por Lars von Trier. La inquietud opresiva de sus imágenes revolvieron a más de un estómago, calmados por la sensibilidad de Björk. Para los amantes de este género, se recomienda “À bout de souffle”, sobre un guión de Truffaut, del poco ortodoxo Jean-Luc Godard, maestro de la cámara alzada. |
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En una época donde la privacidad está regida por las redes sociales, “Paranormal Activity” es una joya en bruto. Nos gusta el morbo de ver invadida la intimidad ajena. Se trata de un reality oportunista que ha sabido usar el tirón de las nuevas tecnologías, lo demás es humo. La espontaneidad que exige una película de estas características no la exime, por desgracia, de un final pobre, al estilo Youtube más purista y casero.
El subtítulo “basada en hechos reales” le garantiza un interés que no posee. Otro Gran Hermano
invade la cartelera con más ruido que nueces. |
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Texto: www.photomusik.com
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