Todo
estaba preparado en el "living
room" de los Smith, en su bonita
casa familiar de Malibú, allá
por los EE.UU. Había lucido el
sol con sus barras y estrellas, Lionel
Richie en la radio, fiesta en el living.
"OK, man!".
Las palomitas recién sacadas
del microondas y las botellas de cola
y cerveza americanas habían invadido
el sofá. La familia Smith se
arremolinaba como zombies frente a la
caja tonta, sus mentes pensaban a ritmo
de touchdowns, líneas de 50 yardas
y Patriots.
¡Era
la Super Bowl!,un fenómeno de
hombres musculosos capaz de paralizar
a 100 millones de personas: algo así
como el fútbol al más
propio estilo de vida americano.
La Super Bowl es espectáculo
tanto para el que le guste como para
el que no, no cabe duda, pero ante todo
representa publicidad y muchos millones
de dólares. Es una mezcla de
deporte nacional y música (americana,
claro). En la edición de 2004,
la parte artística corría
a cargo de Justin Timberlake y Janet
Jackson. Ahí fue cuando la fiesta
se convirtió en tragedia para
unos e inquisición para otros.
En
un arrebato de excitación irreprimible,
Timberlake arrancó parte del
corpiño de Miss Jackson, dejándole
un pecho al descubierto ante medio mundo.
Una teta que vieron grandes y pequeños,
rudos camioneros de Missouri y recatadas
esposas de Oregon. El sr. Smith de inmediato
cubrió los ojos de su hijo mientras
los suyos no se inmutaban ante semejante
visión
("¡es la teta de
la Jackson, vaya touchdown!").
Vale, se le ha visto una teta a Janet
Jackson, ¿y qué?
Al día siguiente, desde los directivos
de la CBS, a los de la Liga Nacional
de Fútbol Americana (NFL), hasta
la misma Jackson, lavaban su honor entre
disculpas y querellas. Incluso el gobierno
de Bush ha comenzado a investigar sobre
el incidente.
No sé si llorar de vergüenza
o reír de pena.
Inciso:
Hablando del tejano, ¿por
qué no se disculpa igual ante
las guerras y las injusticias que promueve,
y se olvida de ese moralismo aborregado
del que tanto presume semejante espécimen?
¿Dónde
está el error? pregunto desde
mi ignorancia más profunda. Por
su lado, MTV, la cadena
de televisión encargada de producir
el espectáculo afirmó
en un comunicado que "el incidente
con el vestuario de Janet Jackson fue
improvisado, no fue planificado, no
fue intencional y fue inconsistente
con las medidas que habíamos
tomado sobre el contenido de la actuación".
Constantemente los yanquis nos bombardean
con películas repletas de escenas
en las que el "imprevisto"
de la teta de la Jackson es una ofensa
a la carga erótica del film y
los cines se llenan para ver esas películas.
En Estados Unidos se produce un muerto
cada dos minutos y nadie dice nada,
es normal que la gente lleve revólver
(lo ampara la ley), y nadie se escandaliza,
la violencia
en las escuelas es el pan de cada día,
¿en qué conflicto internacional
no se encuentra metido este país?
y nos parece normal.
De repente, toda una nación clama
al cielo porque a la Jackson se le ha
visto una teta (¿será
un arma biológica, o simple biología
química? me pregunto, para quitarle
hierro al asunto). Me trae sin cuidado
que la exhibición de quitar el
corpiño fuera ensayada en varia
ocasiones, como se disculpa la Jackson,
me trae sin cuidado, ¿qué
pretende justificar?
Comienzan a rodar las primeras cabezas,
y la mano censora del puritanismo americano
omite una escena de la serie "Urgencias"
en la que aparece el pecho de una paciente,
una mujer americana.
Se va a producir una censura mediática
en la retransmisión de los Grammy
y de los Oscar para evitar que este
tipo de incidentes vuelvan a manchar
la reputada moralidad americana.
La nación más puritana
del mundo ha sido tocada en su punto
débil, claro que si pones la
MTV a cualquier hora no dejan de salir
videos con escenas más que calientes.
Por lo visto todo estaba preparado,
pero no se contó con el arrebato
de Timberlake. Quizás este divertido
incidente se deba al fuego de la pasión
que aún vive en el corazoncito
de Justin, la llama de un romance que
tuvo con la Jackson... aunque afirmar
que la Jackson disfrutó es jugarme
el pescuezo, ya que igual me acusan
de violencia sexual. Por lo tanto, callen
los ignorantes y gocen de las ingenuidades
del ser humano.
Desde un punto de vista de libremercado
y genuinamente americano, no me extrañaría
nada que McDonalds (sí, la cosa
esa con la que alimentas tu cerebro)
tome el incidente como filón
publicitario para un remake del "I'm
Loving it!" pero más ardiente
y cargado de cebolla.
¡La que se ha armado con la
exhibición de la teta de la Janet
Jackson! (dirían los sabios
de Alpedrete). Hot, hot, hot.