BEETHOVEN Y SUS CURIOSIDADES
Beethoven y el plomo: Recientemente se ha analizado un pelo de Beethoven genéticamente, y se ha descubierto que en su sangre había un alto contenido en plomo, quizá, por beber líquidos que estaban contenidos en barriles fabricados con este material. Es posible que su mal
genio y la sordera le vinieran de la presencia de este venenoso metal en su cuerpo.

"Para Elisa" es en realidad Para "Teresa": La famosísima bagatela para piano de Beethoven que todo el mundo conoce como "Para Elisa" (compuesta el 27 de Abril de 1810), en realidad es "Para Teresa", ya que es el título que aparece en el manuscrito original de Beethoven. Se cree que un error en los copistas por la mala caligrafía de nuestro compositor provocó esta 'pequeña' confusión.

La 5ª Sinfonía en la Segunda Guerra Mundial: Desgraciadamente, los Nazis utilizaban como código en las transmisiones de guerra las famosas cuatro primeras notas de la 5ª Sinfonía, puesto que su transcripción en Morse (3 puntos y una raya) equivale a la "V" de victoria.

Beethoven no oyó la 9ª sinfonía: En el estreno de esta gran obra, Beethoven estaba completamente sordo. De hecho, se dice que al
terminar el concierto, él pensó que los músicos habían dejado de tocar por algún motivo, y se dió la vuelta y vió a toda la sala de pié aplaudiendo: el concierto había finalizado.

Misterioso Himno a la Alegría: Beethoven pasó años obsesionado con una cancioncilla que no paraba de tararear, y en numerosas composiciones la incluía pero sin definir del todo. Lo más llamativo de esto es que hay una pieza anterior a él de Mozart que es casi igual a esta melodía, cantada por un coro. Se desconoce si Beethoven la conocía o fue casualidad, el caso es que el sueño de Beethoven se cumplió al ver esta melodía integrada en la culminación de su 9ª sinfonía.

Beethoven Ecologista: Beethoven amaba la naturaleza hasta el punto de decir "Prefiero mil veces a los árboles que a cualquier persona". Sólo hay que escuchar su sexta sinfonía, La Pastoral, en la que el compositor es capaz de traducir la imagen de la naturaleza a los sonidos de la orquesta.

Desaliñado y extraño: Beethoven solía ir por la calle con ropas viejas, con los pelos desordenados, gritando las melodías que se le ocurrían a plena voz (él no podía oírse) y anotándolas en un cuaderno. También hay que hablar de sus monumentales e históricos ataques de ira, comparándolo con un "animal salvaje", ya que incluso en ocasiones llegaba a destrozar las habitaciones donde se alojaba. Aunque con la gente a la que quería, como su sobrino Karl, sí que era cariñoso y cambiaba radicalmente de actitud.

La 9ª sinfonía en el espacio: La sonda espacial Voyager lanzada hacia el espacio, contiene, además de discursos de los presidentes de la época en la que fué lanzada y diversas anotaciones sobre la raza humana, un disco con la 9ª Sinfonía de Beethoven.