El suelo yugoslavo, ya desintegrado como entidad política, ardía en 1992. Belgrado, mientras tanto, estaba viviendo una paz militar, un malesar social yun calentamiento político. Slobodan Milošević había sumido a Serbia en el caos. Los Balcanes se convirtieron en un avispero.
La oposición estaba representada por Vuk Drašković (Вук Драшковић), quien en 1990 se perfiló como una alternativa al totalitarismo de Milošević. Drašković, predicador de un patriotismo serbio “democrático”, es abandonado por el nacionalismo de Belgrado y crea su opción política: el Partido Democrático Serbio (Serbian Renewal Movement o Srpski Pokret Obnove, SPO). Cuando tuvo que competir contra el Partido Socialista de Serbia (SPS) de Milošević, no reparó en acercarse al nacionalismo serbio para arañar votos durante las elecciones del 9 de diciembre de 1990. Su voz anti gubernamental era conocida en Belgrado. Su gran poder de palabra y concentración social incitaban al cambio político. ¡Basta ya de este socialismo fascista! El 9 de marzo de 1992, recorre las calles de Belgrado en una manifestación multitudinaria junto al patriarca Pavle contra el gobierno de Milošević. Poder político y poder religioso van de la mano dentro de la Iglesia Ortodoxa Serbia (Српска православна црква).
En esta lucha de carniceros, El Tribunal Penal Internacional para la antigua Yugoslavia (TPIY) condenó a 35 años de cárcel a Milan Martic en junio de 2007. El líder de los serbo-croatas durante la guerra de 1991-1995 fue acusado de los delitos de homicidios masivos y torturas contra las comunidades no serbias de Croacia. Martic ordenó en mayo de 1995 bombardear el centro de Zagreb para “causar el mayor número de víctimas posibles”. El móvil fue la respuesta a ataques croatas contra ciudadanos serbios. Guerra de locos.
El 21 de julio de 2008 Radovan Karadžić es detenido. Ni clandestinidad ni anonimato fueron las armas que utilizó el presidente de la Repúblika Srpska entre 1992 y 1996 para tener vida pública. Años atrás, otro mafioso y criminal de guerra serbio, el líder de los Tigres y héroe nacional serbio, Zeliko Poznjatovic, alias Arkan, se paseaba impunemente por Belgrado. Poseía varios negocios en el complejo hotelero Intercontinental de la capital balcánica. Business man. Un ajuste de cuentas entre mafias acabó con su vida. Nunca se le detuvo: ¿falta de pruebas?... No era molesto, ni mediático, a pesar de sus campañas militares en Bosnia-Herzegovina.
El cerco a Karadžić se estaba estrechando, protegido por los servicios secretos y la policía serbios. Unas semanas antes de su apresamiento en las calles de Novi Beograd, el presidente serbio Boris Tadić (Борис Тадић) destituye al jefe del espionaje, Rade Bulatovic, y colocó en el puesto a Sasha Vukadinovic, un hombre de su confianza. ¿Por qué Karadžić no ha sido capturado hasta ahora? La C.I.A. le había estado protegiendo hasta 2000, cuando interceptó conversaciones telefónicas en las que se descubrió que seguía liderando al SDS (Partido Democrático Serbio). Ni la propia Agencia de Inteligencia Norteamericana, ni el gobierno de Estados Unidos, ni el servicio secreto británico, ni Richard Hoolbrok han podido evitar la polémica desatada en torno al diplomático norteamericano. El arquitecto de los acuerdos de paz de Dayton (1995) que pusieron fin a la guerra de Bosnia-Herzegovina ofreció un posible pacto al líder serbobosnio. Un acuerdo a través del cual se negoció una retirada de Karadžić de la vida pública en julio de 1996. Hoolbroke ha negado la existencia de dicho acuerdo. El periódico Kurir ha publicado una supuesta copia del trato. ¿O fue un apretón de manos con salibazo incluido, sin papeles de por medio?
La diplomacia norteamericana, y mediadora del conflicto, pretendía poner en el anonimato a un criminal que ahora están procesando justamente. ¿Quién es el malo?
tesis a) el encubridor de Karadžić
tesis b) el montenegrino encubierto
¿Cuál es el motivo de este posible pacto?
El paradero de Karadžić siempre se ha conocido. Todo huele a que, en una presunta maniobra política, se ha esperado al momento más oportuno para Serbia. Maniobra que va a proporcionar puntos al presidente Boris Tadić en su carrera hacia la integración en la Unión Europea.
La Gran Serbia es una idea mesiánica de Belgrado. Lo mismo ocurre con la Gran Croacia de Franjo Tuđman, adelantada por Ante Pavelić. Fue el fundador del Movimiento Revolucionario de Levantamiento Croata Ustaša en los años 30 del siglo pasado que más adelante se convirtió en líder del Estado Independiente de Croacia. Este movimiento ultranacionalista consolidó su poder durante la Segunda Guerra Mundial, bajo tutoría nazi. Cuando las luchas ente ustaša y chetniks, guerrilleros nacionalistas del Real Ejército Yugoslavo en la Patria, estaban de moda. Los ustaša croatas utilizaron las tácticas nazis contra serbios, gitanos y judíos. Durante la guerra croata, Tuđman y su Unión Democrática (Hrvatska demokratska zajednica, HDZ) dirigió con mano de hierro y victimista los hilos de Croacia a partir de 1991. La guerra en suelo croata fue el primer eslabón de los enfrentamientos civiles ocurridos en la antigua Yugoslavia. Por aquel entonces, ninguna potencia internacional prestó atención al problema: era una guerra más. El resto de Europa y Estados Unidos permanecieron callados como… eso que todos pensamos. Cuando el conflicto fue engordando, y la intervención internacional era más que evidente, el mundo se estremeció y actuó.
Entre 1990 y 1991 la única presencia extranjera fue la de los soldados mercenarios que engrosaron las filas del nuevo Ejército croata (HV). La comunidad internacional, y su mirar hacia otro lado, no quisieron frenar la guerra cuando era posible, antes de una intervención armada. Alta política.
Tuve la suerte, o la desgracia, de convivir en Belgrado con la población civil serbia y con los refugiados venidos de toda Yugoslavia. Con guerra y milicia croata en las trincheras de Nova Gradiška, en Masicé, en Banja Luka, Slabonski Brod, Bosanski brod, en Osijek, Vukovar, en Mostar. Un día les mandaron a filas y se tuvieron que enamorar del Kalashnikov. Los Cascos Azules llegaron de incógnito a Nova Gradiška y allí se quedaron. Sin hacer ni decir nada, ¿qué órdenes esperaban mientras se alimentaba día a día una guerra fratricida? Al mismo tiempo, serbios y croatas destruían iglesias. Los edificios religiosos son muy importantes en la cultura eslava. Las aldeas se arrasaban con personas dentro. Todo iba en el lote. Se despertó el espejismo de la Segunda Guerra Mundial. Los serbios invadieron territorio croata. Los radicales ustaša, dirigidos por el NDH y el Consejo Croata de Defensa (Hrvatsko Vijeće Obrane, HVO), hacían de la suyas. Lo llamaban “incursiones relámpago”. Los casi 8000 muertos de Srebrenica cayeron en diferente proporción diseminados por la geografía yugoslava, pero en mayor número. Murieron con el mismo salvajismo: mientras dormían, en trincheras. Muchos eran niños y ancianos. ¿Sabían algo de esto las autoridades de Zagreb o Belgrado?... Los acuerdos de paz y alto el fuego no llegaban hasta aquí. Los luchadores contra el “agresor chetnik” también merecen ser juzgados. Tienen derecho a un abogado.
Alija Izetbegović ha sido el impulsor del espíritu musulmán dentro del territorio bosnio. Su mente estaba centrada en la creación de un estado islámico frente a los ortodoxos y católicos. Visitante de las cárceles yugoslavas desde 1946, Izetbegović planteaba en su "Declaración Islámica" de 1970 la imposibilidad de convivencia entre el Islam y las instituciones laicas, y postula la república islámica como la forma de Estado ideal para Bosnia. Se afirma que los musulmanes militantes deberán ejercer su poder allá donde sean "moral y numéricamente superiores". En las ciudades de Kiseljak y Busovača, al noreste de Sarajevo, sometidas a ataques bosnios, los croatas concentraron a musulmanes adultos para realizar trabajos forzosos reforzando sus posiciones. El brazo armado de Bosnia-Herzegovina era la “Armija”. El general bosnio Sefer Halilovic ostentaba el rango de comandante general. La población croata lo ha acusado de participar como coronel del Ejercito Federal Yugoslavo (JNA) en el cerco y aniquilamiento de Vukovar, en la guerra ante Croacia. Junto a Mladic, comandante en jefe del Ejercito de los serbios de Bosnia, Naser Orić fue otro de los señores de la guerra. El general bosnio estuvo al mando del enclave de Srebrenica hasta antes de que se produjera la masacre de Ratko Mladic y Karadžić. Después de tener diferentes destinos por todo el suelo yugoslavo, este miembro del cuerpo de seguridad de Slobodan Milošević llegó a la comisaría de policía de Srebrenica. En su haber se encuentran crímenes contra la población serbia. Abandonó Srebrenica meses antes de la masacre serbobosnia.roaciabbbb
El 16 de junio de 1993, Milošević pacta con Tuđman la repartición de Bosnia. Tuđman e Izetbegović pactaron para repartirse Bosnia entre croatas y musulmanes. Pactos sin soluciones finales.
El suelo de Bosnia-Herzegovina se pobló de campos de concentración dirigidos por serbo bosnios. Auschwitz-Birkenau o Berger-Belsen dejan paso a Tesanj, Mostar, Gorazde, Maglaj, Bihac. 250.000 muertos, 2,5 millones de desplazados. Los ustaša del NDH croata crearon durante la Segunda Guerra Mundial Krapje y Bročica. De más tradición es Logor Jasenovac. Se inauguró en agosto de 1941. Ante Pavelić lo abrió para albergar a los serbios, considerados como el mayor enemigo racial del NDH. Este campo de concentración también confinó a judíos, gitanos y un gran número de miembros de la resistencia croata, en su mayoría partisanos. A Jasenovac se le conoce como "el Auschwitz Balcánico". Luego siguieron Ciglana (Jasenovac III), Kozara (Jasenovac IV) y Stara Gradiška (Jasenovac V). Durante la Segunda Guerra Mundial, en Korita, cerca de Mostar, los fascistas ustaša croatas mataron a 136 serbios de una población de 280 habitantes. Un millón de serbios murieron a manos de los ustaša de Pavelić (llamado poglavnij, líder).
En los Juicios de Núremberg no aparece condenado de colaboracionismo ningún ustaša por sus masacres filonazis.
La corrupción de esta guerra ha salpicado incluso a las fuerzas pacificadoras de la ONU en Sarajevo. Durante agosto de 1993, fueron repatriados 23 Cascos Azules: 19 ucranianos y 13 franceses. Comerciaban con prostitución, alcohol, heroína, cigarrillos, gasolina, comida. No se tomaron sanciones severas contra ellos porque sus corruptelas no produjeron muertes directas. Porque la sangre no se vio chorreando, ni cuerpos descompuestos producto de la ira fanática serbo-croata-bosnia, multiétnica. Sólo comerciaron con la vida de la gente, gente que estaba sufriendo una guerra. Dejar que un niño muera porque no ha recibido la comida que la ayuda internacional les enviaba no era un crimen contra la Humanidad. Esos víveres se encuentran a buen recaudo en los bolsillos o estómagos de estos adalides de la paz. No son criminales porque no han cometido delitos de sangre, no fueron juzgados. Son malos profesionales.
La Gran Serbia de Milošević, la Gran Croacia de Franjo Tuđman y la Gran Bosnia de Izetbegović. Nadie es inocente, pocos son juzgados. Unos pasan a la historia como vencedores, otros como vencidos.
Me alegro de que Karadžić haya sido capturado, pero me quedará el sabor amargo de no haber visto a Tuđman o Izetbegović ante un Tribunal Internacional, el de La Haya por ejemplo. Espero que den su merecido a Radovan Karadžić, se lo ha ganado. ¿Y el resto de culpables que quedan por juzgar?... Algo que no se cumplirá en su totalidad, teniendo en cuenta que a partir de 2010 La Haya dejará de encausar a los ex militantes serbobosnios, para ser juzgados en su país. Qué asco de guerras y que asco de políticos.
