Fisherman's Friends descubre hombres sencillos que comparten melodías rítmicas sin ansias de fama. Lo previsible, sin asentarse en la norma, no clava las zarpas en un argumento manido: cazatalentos discográfico conoce banda y juntos escalan hacia la fama con chica en medio. El sonido tradicional dirige el sentimiento de una trama amena envuelta en estética de comedia cercana. Los problemas económicos hacen peligrar la amistad en el pueblo.
Lo nuevo de Chris Foggin se acerca a
Un tipo genial, el cuarto largometraje del director británico Bill Forsytrh. La eufonía es troncal para ambos títulos en un ambiente de palangres y anzuelos. Detrás existen vivencias que dan cuerpo a la
saloma, cadencia tradicional del mar, entonaciones solistas como
La viuda, hundimientos, albatros, alegría compartida. Las letras evocan aliento con estilo melancólico, jocoso y amargo; son la voz del pasado que tonifica sus arrugas. Las composiciones de la banda córnica emplean música sin derechos de autor que forma parte de un catálogo con historia.
