Entrada a nuestra tienda
To our shop

flecha
Home

 
 
PHOTO

USIK

 

Buscador interno

Loading
pto

.MENÚ
.ZONA GRÁFICA

puntoConcierto 1
puntoConcierto 2
puntoConcierto 3
puntoConcierto 4
puntoRecuerdo 1
puntoRecuerdo 2
puntoBiografías
puntoPasaron
puntoReportajes
linea puntos
ZONA AL DÍA

puntoAgenda
linea puntosAgenda Clásica
linea puntosNoticias
linea puntosNovedades
linea puntos
.ZONA DE OPINIÓN
puntoPágina del Musinternauta
puntoEntrevistas
puntoFrases musicales
puntoCine y espectáculos
linea puntos
.ZONA DE CLÁSICA
linea puntosAgenda Clásica
linea puntosBiografías
linea puntos
.ZONA DE CONTACTO
puntoForo
puntoDe interés social
puntoEnlaces
puntoNewsletter
puntoTIENDA
linea puntos
.ZONA DE OCIO
linea puntosGraffitilandia
linea puntosAnecdotario
linea puntosChistes musicales
linea puntosLetras de canciones
linea puntosJuegos
linea puntosMúsica y salud
linea puntosRADIO
linea puntos
.ZONA DE DESCARGAS
puntoSalvapantallas
puntoProgramas
puntoTonos musicales

pto

 

 
 


 


LAS VOCES DEL SILENCIO

PALABRAS SOLIDARIAS
Histórico

 

EL CABREO DE CRISTINA CIFUENTES
Sobre el enfado de Cifuentes con la UCO por los informes que la relacionan con la Púnica

JGS

Cristina Cifuentes se cabrea
 

Cuando el río suena, agua lleva. Esta semana movida por la resaca isidril, Cristina Cifuentes se ha rebotado más que una pelota de goma contra un ocupa manifestándose, molesta ante su presunta vinculación con la trama Púnica: ese nombre tan feo y hediondo que persigue al Partido Popular. Que un informe reciente de la Unidad Central Operativo (UCO) estreche el cerco a las corruptelas derivadas de financiación ilegal dentro del PP no es noticia; que el dedo apunte a Cifuentes, sí. Su parición se ha convertido, causando revuelo informativo, en afrenta personal contra la actual presidenta de la Comunidad de Madrid: sucesora de Esperanza Aguirre y delfín en la sombra de Rajoy con permiso de Cospedal. El malestar, que no conduce a la indisposición, procede de una información basada en filtraciones insostenibles para la número uno del PP en Sol. ¡Quién no se siente incómodo cuando te llaman ladrón sin haberlo sido!, ¡quién no está molesto cuando las sospechas te empujan al círculo sucio de la corrupción que rodea tu partido-tu casa; cuando dejas de ser la manzana limpia que sobresale augusta! Porque el Partido Popular es un saco de manzanas podridas que aún no había viciado esa integridad verde doncella de Cifuentes. Un colorido que se agradece entre tanto político repulsivo, tanto tragador encarcelado y algún ex presidiario mendigando su libertad después de 32 meses en la sombra jugando al mus.

No hay nada de malo en que la policía quiera analizar vínculos que sólo albergan indicios de sospecha. Si se hubiera convertido en conjetura lanzada al aire por el PSOE, la cosa cambiaría al formato de revista pero viniendo de la Policía, el cariz es menos amarillista. De repente, un cúmulo de coincidencias, capaz de reventar el hígado a cualquiera, ha engordado exponencialmente la sospecha perversa sobre Génova.
A pesar de que una gestión particular ha secado el Canal de Isabel II gracias a la sociedad Emissao Engenharia e Construcao y de que concesiones irregulares a Arturo Fernández (Grupo Cantoblanco) responsabilizan a Cifuentes, “En política no vale todo” para esta abogada madrileña. Otra punta del iceberg político que lucha contra un cambio climático acelerado ha dejado de ser cotilleo de salón privado. Apoyado por el beneficio de la duda, me permito barruntar que en un nido de serpientes, como es el cercano a la presidenta madrileña, hasta las cucarachas pican; que la mediocridad se expande como marea negra, que produce metástasis.

Cifuentes dice que vive de alquiler, como otros muchos ciudadanos. Es alguien de andar por casa en babuchas; no frecuenta áticos fantasmales. ¿Por qué justificase ante lo innecesariamente justificable?¿De qué tiene miedo la presidenta de la Comunidad de Madrid?, ¿qué le molesta tanto si es inocente de lo que, hoy, sólo son indicios?
Eso de lavar el honor dañado por una injuria parece tan medieval... y, hasta cierto punto, romántico. Manchar el nombre de Cristina Cifuentes es tan divertido como cambiar unos pañales sucios. Un cabreo es como las deposiciones: siempre termina por salir a la superficie, primero como metáfora olorosa y luego con solidez compacta. Esta motera de chupa negra dijo, no hace mucho, que “Sólo soy una chica rubia”, y me pregunto si también yeyé. Se ha sentido ofendida por informaciones, a su juicio, tendenciosas y eso da que pensar.
Es bueno que el río suene cantarín por que entonces agua lleva.

 


JGS

La revista Photomusik no se hace responsable de las opiniones de sus colaboradores expuestas en esta sección.
<< 2016        < anterior          siguiente >       2018 >>  

© Copyright Photomusik.com