Entrada a nuestra tienda
To our shop

flecha
Home

 
 
PHOTO

USIK

 

Buscador interno

Loading
pto

.MENÚ
.ZONA GRÁFICA

puntoConcierto 1
puntoConcierto 2
puntoConcierto 3
puntoConcierto 4
puntoRecuerdo 1
puntoRecuerdo 2
puntoBiografías
puntoPasaron
puntoReportajes
linea puntos
ZONA AL DÍA

puntoAgenda
linea puntosAgenda Clásica
linea puntosNoticias
linea puntosNovedades
linea puntos
.ZONA DE OPINIÓN
puntoPágina del Musinternauta
puntoEntrevistas
puntoFrases musicales
puntoCine y espectáculos
linea puntos
.ZONA DE CLÁSICA
linea puntosAgenda Clásica
linea puntosBiografías
linea puntos
.ZONA DE CONTACTO
puntoForo
puntoDe interés social
puntoEnlaces
puntoNewsletter
puntoTIENDA
linea puntos
.ZONA DE OCIO
linea puntosGraffitilandia
linea puntosAnecdotario
linea puntosChistes musicales
linea puntosLetras de canciones
linea puntosJuegos
linea puntosMúsica y salud
linea puntosRADIO
linea puntos
.ZONA DE DESCARGAS
puntoSalvapantallas
puntoProgramas
puntoTonos musicales

pto

 

 
 


 


LAS VOCES DEL SILENCIO

PALABRAS SOLIDARIAS
Histórico

 

FÉLIX RODRIGUEZ DE LA FUENTE,
ESE ANIMAL DIVULGATIVO
Hoy sería un felino nonagenario amante de la naturaleza salvaje

JGS

Félix Rodríguez de la Fuente volcó su pasión por la Naturaleza
 

Recordar a Félix Rodríguez de la Fuente es recordar la banda sonora de El hombre y la tierra (1974-1981). El sonido se convertía en imagen, su música en plasticidad: desde el planeo silencioso del buitre, la vigilia del búho, la zancada ágil del conejo hasta el abrazo de la anaconda. Los animales eran los protagonistas y Félix se acercaba a su mundo.
Antón García Abril es el distintivo musical de este divulgador ambientalista en la serie dirigida por este defensor de la naturaleza burgalés. Su sonoridad acompasaba la carrera de las ovejas ante el acecho mudo del lobo. Fue la sintonía de la supervivencia natural en el paso de la vida a la muerte sin que la mano humana la convirtiera en carnicería. Paralizaba las tertulias en los bares para acercarnos a la diversidad animal. Las imágenes de Félix, hasta ahora novedosas, hubiesen perdido magnetismo sin ella. La misma intensidad que entonces coloreaba el paisaje sigue activa al saborearla 40 años después. Ha compuesto la esencia melódica para series tan identificativas como Los camioneros, Anillos de oro, Segunda enseñanza o Brigada Central. Escribió para Ferdinando Baldi (El clan de los ahorcados, La ruta del opio), junto a Don Powell, el tema principal que ambientó Texas, adiós: un spaguetti western protagonizado por Franco Nero.

Félix era un tarzán bajito, un Francisco de Asís ecológico que sabía hablar y entender a los animales, nuestro aventurero por tierra, mar y aire. Alguien que adoraba a perros esquimales, cigüeñas y leones, alguien capaz de sobrecogerse ante la muerte de un oso en manos furtivas o denunciar el principio de su extinción; alguien capaz de emocionarse ante la muda de una serpiente más que Christian Dior o Versace; observar a un lince con los mismos ojos que a una cobra, sin miedo. Su forma inconfundible de contar las cosas con intensidad ilustrativa convirtió en protagonista a una voz entusiasmada: guardabosques avizor, espía pacífico del bosque.

Los documentales de Félix popularizaron el término ecológico. Ellos me enseñaron a apreciar la silueta del alimoche dibujada en el cielo, me despertaron la curiosidad por la pertenencia de una huella sobre la tierra, aprendí a escuchar la comunicación animal entre la fronda de 625 líneas mientras descubría los secretos de la fauna convertida en entretenimiento.
La vocación pedagógica, ajena a las excentricidades, se convirtió en profesora particular de una generación; la música del maestro García Abril, en soporte de la historia televisiva española sostenida por imágenes veraces: desde Venezuela hasta Canadá pasando por los misterios ibéricos. El 14 de marzo de 2018, Félix Rodríguez de la Fuente hubiera cumplido 90 años. Un 14 de marzo de 1980, el helicóptero que lo transportaba se precipitó contra el suelo helado de Alaska. A ningún aventurero intrépido, como es el caso, se le ocurriría mejor entorno para morir.

Junto a Curro Jiménez nos hicimos mayores entre trabucos libertadores y chalecos de safari. Félix Rodríguez de la Fuente volcó su pasión por la Naturaleza con un carisma didáctico singular que siempre quedará guardado en el recuerdo de una infancia que despertaba a la televisión en color. Su forma narrativa se dejaba la carne en cada palabra, estableciendo una nueva forma de abordar el reportaje que nos acercaba a la vida animal, siempre apasionada. Llevó el amor por los animales a los hogares con intención divulgativa gracias a un lenguaje llano y cercano.

 


JGS

La revista Photomusik no se hace responsable de las opiniones de sus colaboradores expuestas en esta sección.
<< 2017        < anterior          siguiente >       2019 >>  

© Copyright Photomusik.com