|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
EL VIAJE A NINGUNA Y MUCHAS PARTES
Película Siempre contigo
J. G.
(Madrid,
España)
|
|
|
|
Ficha Técnica |
Video |
|
|
|
|
La sobreprotección es la actitud menos provechosa de un progenitor hacia su hijo. Nadie, por estrecho que sea el vínculo con la persona tutelada, tiene derecho a condicionar su vida. No por ser autista se debe impedir el desarrollo normal de una persona. El amparo de los padres, a veces, es un acto egoísta que huye del consenso a la hora de criar a un hijo necesitado de atención especial. Aharon y Tamara quieren imponer su decisión sobre una persona dependiente. Su relación con él, vivida desde ángulos diferentes, no facilita el acuerdo familiar dentro de su mundo limitado. Cuando una pareja ha roto y es incapaz de convenir el futuro de su descendencia, hay un problema. El mal se agudiza desde esta distancia conducido por derroteros bienintencionados y antagónicos. La disputa por su abrigo genera enfrentamiento cercano a la hostilidad. La cerrazón se opone al diálogo conyugal. Uri sustituye el yo por un tú sufragáneo. La subordinación del débil se agrava peligrosamente. Aharon se consagra a su cuidado minimizando su existencia, vigilada por un ojo tuerto. Cuando la excusa para no desprenderse de él es la exigencia de tiempo afloran preguntas como ¿tiempo para qué?, ¿tiempo para las necesidades de un muchacho singular o para las carencias de un padre confundido (y asustado)? La huida suplanta a la paciencia comprensiva.
|
|
|
|
|
El autismo de Uri observa los movimientos cómicos del cine mudo en una vida artificial que le mantiene activo a su manera. Es un vegetal seguidor de normas sin iniciativa propia. Su ídolo es el personaje que Jackie Coogan interpreta en El Chico junto a Charles Chaplin, enclaustrado en una pantalla. El primero rebosa agilidad y viveza, Uri es débil.
La unión moral y familiar entre dos hombres se mantiene gracias a la dedicación de Aharon. La presencia materna es una alternativa aperturista evitada en la atención del hijo común. Su progenitor acepta la custodia bajo un consuelo poco realista. Lo conoce todo de él excepto el potencial que guarda hibernado en la dependencia. La manipulación afectiva de su educación quiere dirigir los pasos de Uri en un hogar impuesto por sentimientos rivales. La felicidad artificial galopa por el corazón de un adolescente junto a una compañía malinterpretada. La perspectiva de la realidad se reduce a una relación cerrada, sin miras exteriores. Los entornos cambiantes atraen tensión a su comodidad solitaria. El ingreso en la casa nueva inicia un viaje sin destino fijo. La carrera saltarina encuentra lugares y personas comunes en un peregrinaje fugitivo. |
|
|
|
Aharon se enfrenta a dudas como educador. La paciencia estira el apoyo finito, sin raíces. Siempre contigo es un periplo sin parada definitiva, el miedo a una integración no aceptada por el corazón. Su papel mantenido de sufre dolor interno y soledad acompañados por el cariño mutuo. Los colores suaves de una fotografía sencilla, cercanos al realismo documental, se alejan del preciosismo. Sus tonos respetan la linealidad emocional, avivados por la gestualidad de Uri. Los silencios hablan con miradas desconcertadas de un padre perdido. El cariño se aparta de la lágrima fácil con delicadeza e impotencia.
¿La razón será más humana, y potente, que la separación? ¿La relación se fortalecerá con los cambios? ¿Aharon aceptará ser prescindible ante la sociabilidad escondida de su hijo? Sólo el tiempo proporcionará las claves en el inicio de una vida estimulante para todos. |
|
|
La
revista Photomusik no se hace responsable
de las opiniones de sus colaboradores
expuestas en esta sección.
Texto: www.photomusik.com
©
|
|
|
|
|
|
| | |